miércoles, junio 29, 2005

Algo se mueve dentro de mi

Llevo un promedio de un posteo semanal. Este hecho me disgusta ya que si empecé a escribir otra vez era para imponerme una especie de "obligación" donde dejar fluir las ideas que pasaban por mi cabeza, retomar las practicas destrozando esta página y todas esas cosas que en su día me prepuse. La historia ha fracasado por el momento pero que le vamos a hacer si yo soy así!

Después de está reprimenda cada vez que lea mi propio espacio me acordaré de todo aquello que no hago y volveré a ponerme las pilas o al menos esa es la intención :P

Cambiando de tema...

Hace calor, sudo cada vez que decido mover un dedo, me canso de estar aquí y de ir para allí pero a pesar de todo... tengo ganas de hacer cosas!

He estado evaluando mi estado de ánimo con un entendido en la materia de "nuestras paranoias y el mas allá" y hemos llegado a la conclusión de siempre... Culpable: La Luna!!!
Esta teoria casi nunca falla y aun mas si le juntamos que las vacaciones están a la vuelta de la esquina y en pocos días voy a dejar por fin un número par para entrar en uno impar.

Es curioso pero algo raro me pasa con los números impares. Me gustan, me excitan, remueven dentro de mi una cosa que no consiguen los pares. Suelen ser mas movidos con experiencias al límite repletas de risas y buen rollo.

Cosas de la edad? Estoy dejando de lado el sindrome de Peter Pan solo por quemar un año más impar? Se me estará yendo la olla?

No lo sé ni me importa... yo sigo aquí, como siempre, con mis manías, con mis paranoias, con mis bajones, con mis historias, con mis días buenos y mis días malos, con mis ganas de hacer cosas o simplemente de tumbarme sin hacer nada, con mi soledad, con mi esperanza, con mi ideología que buena o mala pero es mía, con tantas otras cosas que ahora no sé pero sabré, con todo eso y más espero sentada al borde del camino viendo como llega el nuevo número a mi vida.

De hoy al día X faltan aun unos cuantos sudores...

lunes, junio 13, 2005

Mundo SubTerraneo

Domingo 10 de la mañana

Después de dormir 3 horas suena el movil avisandome que he de abrir los ojos, levantarme, ducharme, vestirme, salir a la calle e ir hacia el lugar donde me esperaban.

Todavía dormida hago las 3 primeras cosas.

La cuarta es la mas peligrosa. Aunque no hay sol, la luz del día me ciega y hasta que no aparecen mis gafas por algún rincón del bolso me niego a salir del portal y desintegrame a tempranas horas de la mañana.

Con todo el equipo a cuestas continuo mi camino hacia la parada de metro no sin antes esquivar 3 bicicletas que vienen a toda ostia por la acera. Como en ocasiones yo hago lo mismo, no me quejo y continuo el trayecto inmersa en la música que suena en el discman.

Llego a la parada, bajo las escaleras, no me puedo colar porque está el segurata con cara de pocos amigos asi que decido sabar el bono y entrar como las personas normales.

Faltan 3 minutos para que pase el siguiente metro. En el andén solo somos dos. Yo y otra persona con cara oriental, parecía de alguna tribu de mongolia por sus facciones y su altura. Dudo si es hombre o mujer. Inspecciono su cara desde la distancia porque hay algo que me atrae. Se gira. Me dedica una sonrisa. Le dedico otra y entiendo que ya no debo mirarla mas. La situación parece molestarle. Me sumerjo en mis pensamientos mirando la pared grisacea del horizonte. Pienso en no moverme de allí durante varios metros y perderme entre los pensamientos de las personas que entran y salen. Llega el metro con las luces encendidas. El o la personaje de al lado se levanta. Decido seguir sus pasos, sola en el anden mi mente puede perderse no se sabe donde y quedarme todo el día allí. Abro la puerta. Entro. Decido no sentarme aunque luego me arrepiento porque son 6 paradas, pero he cogido postura y me da pereza moverme. Pierdo la mirada hasta el fondo del vagón. Gente diversa camina, habla, mira la siguiente parada, duerme, se despierta, rie. Sigo imaginando ahora la diferencia entre el del silencio del andén y el barullo del tren. Noto que puedo entrar en todos los pensamientos de las personas, cada uno pensando en algo diferente, incoherente, absurdo, inteligente hay alguno que no piensa. Demasiados murmullos en mi cabeza. Dejo de cotillear en los pensamientos humanos y me dedico a contar a los pasajeros. Siguiente parada... "Sagrada Familia". Baja la mayor parte de los que había contado y suben 4 contados, experimento a la mierda. Decido seguir pensando, solo quedan 2 paradas. Juego a mantener el equilibrio en la gran curva, despues de unos minutos "Clot". Me equivoco de salida. Nuevo contacto con la luz, con las ilusiones, con el mundo exterior. Me coloco otra vez las gafas y sigo mi camino hasta las obligaciones del día.

sábado, junio 04, 2005

Recaidas de una larga noche

Amanece...

Otra vez nos ha pillado desnudos buscando ese trocito de oscuridad, buscando a las musas, buscando al enano verde que prometió indicarnos el camino cuando Él apareciera, buscando cualquier antro donde saciar nuestra sed y demorar un poquito más el mañana.

Errantes caminamos entre los coches, entre las escobas matutinas, entre las cajas que van y vienen para provisionar a los consumidores, entre los madrugadores que empiezan un nuevo día cuando nostros aún no hemos terminado el anterior, equivamos a los vecinos cotillas para evitar comentarios sobre nuestras caras demacradas por el cansancio de una noche de humo y alcohol.

La búsqueda nos ha llevado hasta mi portal. Tú querías quemar todas las posibilidades de encontrar a ese ser mágico de cuentos. Yo sabía que hoy tampoco nos iba a deleitar con su presencia y te he dejado en el camino prefiriendo subir a mi edén particular.

Tambaleandome por las escaleras me ha venido a la cabeza ese amor furtivo que tal como vino se ha ido. Me he acordado de sus caricias, de sus besos, de sus apretujones, de como me arropaba cuando tenía frío y su susurro de "Dulces sueños", de su abrazo buscando mi calor en la noche, de...

Me he despartado confusa y asustada de mis propios pensamientos. Yo... que nunca he creido en el enano de cupido, que siempre me he adelantado a él para desarmarle, que le hemos robado las flechas cuando nos faltaban dardos, que le hemos emborrachado para que nos dejara su arco,...

Y ahora... siento que el muy capullo en medio de todas las orgías se atrevió a atravesarme el corazón y romperlo a trocitos sin dejarme el celo para su reconstrucción.

Menos mal que son momentos que pasan y olvido facilmente... En este momento suenan los Canallas con su grito "Si hay k Okupar okuparemos el cielo a ver si hay kojones y nos vienen hoy a echar". Esto es lo que me da fuerzas para reirme de lo ocurrido, enfundarme en el traje de faena y encararme a la cocina que hoy toca limpieza a fondo!!!